El día amaneció soleado y con el cielo completamente despejado pero la
temperatura anunciaba una jornada sumamente fría. Desde las primeras horas de la
mañana la emblemática avenida del Libertador se vistió de fiesta y se preparó
para recibir a miles de espectadores.
Un repertorio de música folclórica de fondo y las vallas perfectamente
ubicadas a lo largo del recorrido delimitado desde la calle Salguero hasta el
Campo Argentino de Polo –donde se daría cierre al evento- daban cuenta que la
fiesta estaba a minutos de comenzar.
Grandes y chicos arribaron al lugar y, con mate en mano para enfrentar las
bajas temperaturas, se acomodaron en sillas propias que llevaron especialmente y
se apostaron a esperar el desfile militar que tuvo su antesala con el
Bicentenario de la Independencia.
“El año pasado fue un poco el inicio de la reconsideración del gobierno
hacia las Fuerzas Armadas y, particularmente, con los Veteranos de Malvinas; lo
que permitió un gran reencuentro con la sociedad. Además, creo que ese suceso
motivó un poco a realizar nuevamente este desfile para coronar los festejos del
25 de Mayo”, manifestó el titular de la Fuerza Aérea Argentina, brigadier
general “VGM” Enrique Víctor Amrein, en diálogo con Noticias en Vuelo minutos
previos al inicio del evento, y continuó: “Con el aporte de nuestros aviones
y los de la Armada creemos que va a ser un lindo espectáculo y que nuevamente
tendremos una gran convocatoria”.
Mientras el público hacía flamear pequeñas banderas y esperaban entusiastas
captar este hecho histórico con celulares y cámaras fotográficas, integrantes de
la Banda de Música de la Escuela de Suboficiales del Ejército “Sargento Cabral”
se ubicaron frente al palco de autoridades, donde se encontraba el ministro de
Defensa, Ing. Julio Martínez, secundado por los titulares de las Fuerzas Armadas
y de Seguridad, y acompañaron con sus acordes todo el evento.
La apertura del desfile estuvo a cargo de las bandas de música de las fuerzas
armadas de Chile, Estados Unidos, Marruecos y Uruguay y les siguieron sus pares
argentinos: representantes de la Fuerza Aérea Argentina, el Ejército, la Armada,
Gendarmería Nacional, Prefectura y la Policía Federal se convocaron a primeras
horas para salir a las calles de la ciudad.
Coloridos uniformes y marchas representativas interpretadas al unísono por
los integrantes de las distintas fuerzas mientras hacían su pasada, aggiornaron
la fría mañana y aportaron júbilo y calidez a lo largo de más de 2 kilómetros de
recorrido.
No hay dudas que cada una pudo lucirse individualmente y llevarse aplausos y
ovaciones; pero hubo dos momentos claves que se sucedieron al inicio y al final
del evento y que es necesario recordar: aviones Pampa, Hércules C-130, IA-58
Pucará y A-4 AR Fightinghawk de la Fuerza Aérea Argentina decoraron el cielo
porteño y enloquecieron al público con el rugido de sus motores y sus enormes
tamaños, momento que quedará para siempre en la retina y los oídos de quienes
pudieron vivenciarlo en vivo y en directo.
¡Viva la Patria! y ¡Gracias! fueron palabras que se repitieron de manera
permanente cuando hicieron su pasada los veteranos de guerra de las tres Fuerzas
Armadas, segundo momento clave de la jornada.
Una vez más, la gente demostró el orgullo que siente por estos hombres y
mujeres que lucharon para recuperar nuestras islas y elevar a nuestro país. Y,
otra vez, la sociedad y las Fuerzas Armadas y de Seguridad pudieron
reencontrarse y vivenciar a flor de piel los 207 años de la Gesta de Mayo,
acontecimientos revolucionarios que permitieron el inicio de la formación del
estado argentino para más tarde ser completamente libres y soberanos.
Sólo resta exclamar nuevamente: ¡Viva la Patria!