Europa se enfrenta a
un riesgo creciente de sanciones, ya que Airbus sigue ignorando los dictámenes
contra sus prácticas ilegales
La Oficina del Representante de Comercio de los Estados Unidos (USTR) ha
conseguido hoy una importante victoria en su largo contencioso con la Unión
Europea sobre las subvenciones al sector aeroespacial.
El Órgano de Apelación de la OMC anunció la anulación de la decisión emitida el
pasado noviembre de que el incentivo fiscal por la producción del Boeing 777X en
el Estado de Washington constituía una subvención prohibida. También mantuvo la
desestimación anterior de las reclamaciones de la UE contra el resto de los
incentivos. La decisión de hoy confirma que el tratamiento fiscal que reciben
Boeing y otras empresas en el Estado de Washington no es una subvención
prohibida.
Además de anular la sentencia anterior sobre el incentivo fiscal, la nueva
decisión cierra la más reciente de las dos demandas contra Estados Unidos
presentada ante la OMC por la UE como represalia por el éxito del recurso
estadounidense contra las subvenciones masivas que los gobiernos europeos
proporcionan a Airbus.
"La OMC ha rechazado otra de las reclamaciones sin fundamento que ha presentado
la UE para intentar desviar la atención de los 22.000 millones de dólares en
subvenciones que los gobiernos europeos han entregado a Airbus y que la OMC ha
declarado ilegales", declara J. Michael Luttig, Director del Departamento Legal
de Boeing. "A la UE no le quedan más vías de recurso ante esta decisión",
añadió.
"La OMC ha rechazado la última de las demandas infundadas presentadas por Airbus
y los gobiernos que lo apoyan. Entretanto, la UE y Airbus siguen incumpliendo
las decisiones de la OMC de forma flagrante; tienen que poner fin a las ingentes
subvenciones ilegales --sobre las cuales la OMC ya advirtió hace un año que no
se había hecho ningún progreso-- o arriesgarse a sanciones a las exportaciones
europeas por parte de Estados Unidos", comentó Luttig.
"Airbus tiene un largo historial de arriesgar el dinero de los contribuyentes
europeos mediante la operativa de préstamos no garantizados con la que se creó
la empresa y se sigue manteniendo. Ahora Airbus y los gobiernos que lo apoyan
están exponiendo a otros exportadores europeos al riesgo de sanciones
estadounidenses, al ignorar descaradamente los dictámenes de la OMC y presentar
contrademandas sin fundamento legal o real contra EE.UU.", siguió Luttig.
"En cambio, Boeing ha apoyado las acciones del gobierno estadounidense para
cumplir sus obligaciones para con la OMC. Hemos apoyado y facilitado los cambios
en los contratos de Boeing con la NASA y con el Departamento de Defensa de EE.UU
para proyectos de I+D que la OMC consideró incompatibles con su normativa",
afirmó Luttig.
"Se trata de una victoria contundente de Estados Unidos. Ahora le corresponde a
la Unión Europea cumplir con el veredicto de la OMC en su contra, y poner fin a
las ayudas al lanzamiento que los gobiernos que apoyan a Airbus conceden a todos
los nuevos modelos de la compañía desde hace tiempo", concluyó.
Boeing es la
mayor compañía aeroespacial del mundo y el fabricante líder de reactores
comerciales y sistemas de defensa, espaciales y seguridad. Como la mayor
exportadora de productos manufacturados de Estados Unidos, la compañía apoya a
las aerolíneas, al gobierno estadounidense y a clientes de gobiernos aliados de
más de 150 países. Los productos y servicios a medida de Boeing comprenden
aviones comerciales y militares, satélites, armamento, sistemas electrónicos y
de defensa, sistemas de lanzamiento, sistemas avanzados de información y
comunicación, y logística y formación basadas en el rendimiento.
Boeing tiene una
larga tradición en cuanto a liderazgo aeroespacial e innovación. La compañía
sigue expandiendo su línea de productos y servicios para satisfacer las
crecientes necesidades de los clientes. Su amplia gama de competencias incluye
la creación de miembros nuevos y más eficientes de su familia de aviones
comerciales; el diseño, la construcción y la integración de plataformas
militares y sistemas de defensa; la creación de soluciones de tecnología
avanzada; y la oferta de opciones innovadoras de financiación para los clientes.
Con sede en Chicago,
Boeing tiene unos 160.000 empleados repartidos entre EE.UU. y más de 65 países.
Se trata de uno de los equipos de trabajo más diversos, polivalentes e
innovadores del mundo. Boeing también cuenta con el talento de los miles de
empleados cualificados que trabajan para sus proveedores en todo el mundo.
Boeing se divide en
dos unidades de negocio: Aviación Comercial (Commercial Airplanes) y Defensa,
Espacio y Seguridad (Defense, Space & Security). Como apoyo a estas unidades
están Boeing Capital Corporation (proporciona soluciones financieras a nivel
global); Shared Services Group (proporciona un amplio rango de servicios a
Boeing en todo el mundo); y Boeing Engineering, Operations & Technology (ayuda a
desarrollar, adquirir, aplicar y proteger las tecnologías y los procesos
innovadores).
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boeing.com